febrero 21, 2025

La ideología de género: un mito para socavar los derechos de las mujeres


Por Soledad Buendía Herdoíza * -.


En los últimos años la llamada “ideología de género” ha sido utilizada por sectores conservadores y de derecha como una herramienta para desacreditar los avances en derechos humanos de mujeres y personas Lgbtiq+. Lejos de ser una teoría o doctrina con bases científicas, este término se ha convertido en un constructo político cuyo propósito es obstaculizar políticas de igualdad y justicia social.

El término “ideología de género” surgió en discursos promovidos por sectores ultraconservadores con el objetivo de desacreditar la perspectiva de género. Mientras que el enfoque de género es un marco de análisis, respaldado por organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), que busca evidenciar desigualdades basadas en la construcción social del género, la “ideología de género” es una etiqueta peyorativa utilizada para tergiversar estos avances.

Los sectores que emplean este término alegan que existe un plan orquestado para “imponer” una visión que borra diferencias biológicas entre hombres y mujeres. Sin embargo, los estudios de género no niegan las diferencias biológicas, sino que analizan cómo las construcciones sociales han determinado roles y desigualdades estructurales que perjudican a las mujeres.

La noción de “ideología de género” ha sido utilizada para deslegitimar políticas públicas diseñadas para combatir la violencia de género, garantizar el acceso a la educación sexual integral y promover la equidad laboral. A nivel legislativo hemos visto retrocesos en diversas partes del mundo, donde gobiernos de derecha han bloqueado leyes de igualdad y han restringido derechos reproductivos con el argumento de que promueven esta supuesta ideología.

En particular, los derechos reproductivos de las mujeres han sido blanco de estos ataques. En países donde movimientos conservadores han ganado influencia se han impulsado legislaciones que criminalizan el aborto, limitan el acceso a anticonceptivos y promueven modelos de familia tradicionales, ignorando la diversidad de estructuras familiares existentes. Todo ello responde a una estrategia para reforzar roles de género que perpetúan la subordinación de la mujer en la sociedad.

La instrumentalización de la “ideología de género” no solo afecta a las mujeres, sino que también impacta a personas Lgbtiq+ al restringir derechos como el matrimonio igualitario o el reconocimiento de la identidad o expresión de género. Además, genera un clima de polarización social en el que se justifica la discriminación bajo el argumento de la protección de valores tradicionales.

A pesar de estos ataques los movimientos feministas y de Derechos Humanos han respondido con resistencia, evidenciando la manipulación detrás de este concepto y promoviendo marcos normativos que protejan los derechos de las mujeres. La lucha contra la violencia de género, por la equidad salarial y el acceso a la salud sexual y reproductiva siguen siendo ejes centrales en la construcción de una sociedad más justa e igualitaria.

Lejos de ser una teoría con sustento real, la “ideología de género” es un mito fabricado para frenar los avances en Derechos Humanos, en especial los de las mujeres. Su uso como arma política busca perpetuar estructuras patriarcales y obstaculizar políticas de igualdad. Reconocer esta estrategia y desmantelar su discurso es fundamental para continuar la lucha por la equidad de género y la justicia social.


*       Exasambleísta ecuatoriana.

 

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